Homosassa, Florida, está situada cerca de la Costa del Golfo de Florida, lo que la hace particularmente vulnerable a los huracanes y sus impactos asociados como inundaciones por marejadas ciclónicas, vientos fuertes y fuertes lluvias. La ciudad, estando a una elevación media, es específicamente susceptible al riesgo de inundación, particularmente de las marejadas ciclónicas, que suelen ser una gran amenaza presentada por los huracanes. Además, este riesgo de inundación se ve aún más exacerbado por la topografía baja del lugar y la proximidad a varios cuerpos de agua, incluyendo el Río Halls y el Río Homosassa. Es esencial notar que este área es relativamente plana, haciéndola propensa a las inundaciones tanto fluviales como repentinas resultantes de fuertes lluvias durante los sistemas tropicales. Durante los últimos 30 años, Homosassa ha sufrido varios impactos de huracanes y eventos de inundación. Más notablemente, el Huracán Hermine en 2016 y el Huracán Michael en 2018, que tocó tierra en Florida y generó significativas marejadas, inundaciones, y daños por viento. Homosassa también experimentó efectos de inundación de varias tormentas tropicales, incluyendo Debby en 2012. Estos eventos históricos amplifican la importancia de los planes de evacuación temprana, sistemas confiables de mitigación de inundaciones, y códigos de construcción sólidos para esta comunidad de Florida.