LaBelle, Florida, aunque está situada más hacia el interior que muchas otras regiones de Florida, no es inmune a las amenazas que representan los huracanes y los sistemas tropicales que los acompañan. Su relativa distancia de la costa a veces puede ser un factor de protección contra la severidad inicial de los sistemas de tormentas; sin embargo, las fuertes precipitaciones y los vientos de alta velocidad a menudo llegan a zonas del interior como LaBelle. Estos pueden causar daños considerables debido a la destrucción provocada por el viento, la caída de árboles y líneas de energía, y las inundaciones. La baja elevación de la ciudad respecto al nivel del mar incrementa considerablemente su riesgo de inundación, especialmente teniendo en cuenta la posibilidad de un aumento proyectado del nivel del mar debido al cambio climático. Históricamente, LaBelle ha sido testigo de varios eventos de tormentas significativos. El devastador huracán Wilma en 2005 afectó la región, con vientos poderosos que causaron daños extensos. En 2017, la ciudad también estuvo directamente en el camino del huracán Irma, lo que resultó en una notable destrucción física y aguaceros que desencadenaron inundaciones locales. Aunque estos son solo un par de ejemplos, resaltan la vulnerabilidad de LaBelle ante eventos climáticos extremos. Es crucial mantener la preparación y la atención a la información oficial y las sugerencias durante la temporada de huracanes debido al potencial de desarrollo de tormentas significativas que impacten a la comunidad.